Miles manifestaron que era una muestra de la pasión futbolera, pero también un reflejo de las desigualdades en las que está inmerso el país. Además, en esa imagen muchos vieron algo más profundo: la soledad de un adulto mayor que no tenía con quién mirar el partido, ni familiar, ni amigo, ni vecino, ni conocido que lo invitara. Quizás haya sido así. Quizás no.

Ahora, a través de una reconocida marca de fabricantes de televisores en conjunto con una gran cadena de ventas de electrodomésticos concretaron un lindo gesto por no quedarse con las ganas a un paso de levantar la copa del mundo: cuando sólo resta un partido, nada menos que la final que jugará Argentina contra Francia el próximo domingo, decidieron regalarle un TV Smart 4KLed con antena incluida.

Don Carlos pasó por el local y la entrega se realizó mientras exclamaba entusiasmado: "¡Vamos, Argentina" con una sonrisa enorme! Tanto desde el comercio como desde la fábrica de televisores no tuvieron mucho que explicar: "aquí nos volvimos a ilusionar", afirmaron. Con ese televisor quizás sea Don Carlos el que pueda invitar a varios a ver la final y vivir un momento inolvidable. A qué muchos no van a dudar. La felicidad se multiplica cuando la das.